miércoles, 18 de marzo de 2009

Café de la Ópera en Barcelona


Desde hace bastante las Ramblas de Barcelona se han convertido en un sumidero donde se agolpa lo peor de varios continentes. Entre carteristas, borrachos tanto profesionales como aborregados anglosajones en despedidas de soltero, prostitutas del tipo venta agresiva por las malas o por las peores, trileros, estatuas humanas que dan más grima que otra cosa, cruceristas enrojecidos que sirven de pasto a la mayoría de las especies reseñadas y de vez en cuando algún barcelonés despistado con cara de haberse perdido algo… pero después del desahogo hay que reconocer que todavía se puede disfrutar de algún sitio que otro… uno sin duda es el Boadas, seguramente el abrevadero con más pedigrí de toda la ciudad. Algo más abajo también merece la pena el Café de la Ópera… donde no es difícil pasar horas charlando sin darte cuenta y disfrutar no sólo de un ambiente entre elegante y decadente sino también (si tienes suerte) de alguno de los camareros más profesionales de la ciudad. Si después de todo todavía te apetece puedes sentarte en una de las mesas de la entrada desde las que las vistas de la riada humana son inmejorables. La Rambra 74, Barcelona.


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