¿Cuantas horas pasas en tu vida sentado en un café?, en mi caso seguro que muchas… ¡pero ojo!, que conste que es una decisión reposada y asumida… qué puede haber mejor que sentarse en cualquier lugar mínimamente tranquilo por dentro y algo bullicioso por fuera a ver pasar el mundo… si eres de los que practican este “deporte” el Village neoyorquino ofrece algunos de los mejores spots para practicarlo. Este café además añade una carta razonable de deliciosas especialidades, desde las típicas pancakes (lo del jarabe de Arce parece de chiste pero hay que admitir que es realmente bueno) o muffins a sándwiches o ensaladas con las que engañar el hambre para seguir investigando por la zona y guardando fuerzas para una larga noche, sin duda lo mejor de la ciudad, los museos y tiendas seguirán donde están otros cien años pero cada noche en Nueva York es única, no las desaproveches durmiendo. Carmine: 212 , Nueva York.
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